The Independent Sentinel #40
The Independent Sentinel #40
Aprendizaje máquina aplicado, el principio de la música y una pesadilla Lovecraftiana
¡Hola!
Soy Javier Fuentes, de Akoios, bienvenido a esta nueva edición de The Independent Sentinel, una publicación mensual dedicada a tratar con calma el dinámico mundo de la Inteligencia Artificial y la Ciencia de Datos.
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En esta edición hablaremos de cómo aprender Machine Learning, de los cambios que se avecinan en la industria musical y de monstruos de otras dimensiones.
¡Arrancamos!
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1. Tendencias 📈
🙇🏻♂️ Aprendiendo los fundamentos del Machine Learning
Este antiguo tweet de Naval se me quedó grabado desde el momento en que lo leí y es que, en el mundo actual de abundancia infinita de información accesible (y muchas veces gratuita), es más cierto que nunca eso de “el que no aprende es porque no quiere”.
Si salimos por un momento de la vorágine de la IA generativa, veremos que hay multitud de recursos muy valiosos para entender los principios del Machine Learning, algo no imprescindible para hacer uso de los modelos pero si -siempre que sea posible- para entenderlos y diseñarlos.
Por ejemplo, hace un tiempo que la Universidad de Cornell, liberó un completísimo curso sobre Machine Learning Aplicado a cargo del profesor Volodymyr Kuleshov.
Empezando por los principios básicos, el curso va guiando al alumno para comprender los algoritmos más conocidos en el ámbito del Machine Learning y explicando cómo aplicarlos en la vida real. Debajo puedes ver el vídeo introductorio y aquí el listado completo de clases.
Aunque todo está explicado de manera fantástica, seguir este curso requerirá que el alumno tenga conocimientos matemáticos intermedios y, sobre todo, ganas de aprender.
Por si fuese poco, los profesores de Cornell que han creado este curso, lo hicieron con la intención de que fuese “ejecutable”, por lo que lo han acompañado de un completo repositorio con Jupyter Notebooks con todos los ejemplos del curso. Una auténtica joya.
🎶 Una nueva era para la música
Hace apenas unos días AllttA, un duo musical de rap electrónico con apenas 100.000 oyentes en Spotify, publicaba un tweet que comenzaba con un “Imagina que…” seguido de un breve vídeo con una canción llamada “Savages”:
Aparentemente, no es más que un trozo de una canción hip-hop pero, si miramos a los hashtags de la publicación y lo escuchamos con detenimiento, vemos que en el fragmento se está replicando la voz del conocido rapero Jay-Z con una Inteligencia Artificial.
Como era esperable, el tweet desencadenó una oleada de opiniones ya que este hecho tiene implicaciones a varios niveles: artístico, legal, industrial, etc.
Como reacción a la noticia, el productor musical Young Guru reconoció sus preocupaciones sobre el futuro de la creación musical.
En su publicación el productor reconoce que la tecnología será imparable y que “será imposible volver a meter al genio dentro dela lámpara una vez ha salido”.
En su opinión, “La gente no debería poder hacerse con el nombre, imagen o voz de un tercero sin permiso” y, para ello, Young Guru aboga por crear nueva legislación que pueda proteger las creaciones de los artistas y, lo que es más importante, que les ayude a proteger su propia identidad (voz, apariencia, etc).
Aunque no está confirmado, se rumorea que la tecnología escogida para la síntesis de voz ha sido la de ElevenLabs, pioneros en este campo.
Sea o no correcto y a sabiendas de lo dificultoso -aún- de copiar el talento creador humano, es tentador pensar en la posibilidad de que artistas que nos han dejado pudieran seguir haciendo canciones.
¿A quién no le gustaría poder escuchar nuevas canciones con la milagrosa voz del ya desaparecido Jeff Buckley?
2. Historias 📔
👶🏻 Una infancia no muy feliz
El 20 de Agosto de 1890 nacía en Providence, Rhode Island, Howard Phillips Lovecraft, el padre de la literatura de horror moderna.
Su infancia estuvo marcada por la temprana muerte de su padre, que falleció poco después de haber sido ingresado en un centro psiquiátrico, cuando Lovecraft apenas tenía 8 años.
Por ello, la crianza del pequeño Howard corrió a cargo de su madre, Sarah Susan Phillips, con la que Lovecraft no mantenía una relación idílica. Su madre, extremadamente puritana y conservadora actuaba con él de una manera especial, le sobreprotegía de manera excesiva mientras que, a la vez, evitaba mostrarle signo alguno de afecto o cariño.
Esta especial relación con su madre acabó condicionando su comportamiento adulto, hecho que en parte explica sus dificultades para relacionarse y su personalidad introspectiva. Se dice que, para evadirse del férreo control ejercido por su madre, Lovecraft solía dar solitarios paseos por cementerios, bosques sombríos y lúgubres cuevas.
La muerte de su padre y las dificultades económicas de la empresa de su abuelo, Whipple Van Buren Phillips, hicieron que Lovecraft acabase viviendo únicamente con su madre y su abuelo en su enorme casa -ya sin sirvientes- en torno a 1900.
La influencia de su abuelo fue positiva para Howard, ya que motivó su curiosidad intelectual y le introdujo tanto en clásicos atemporales de la historia (Las Mil y una Noches, La Odisea, La Ilíada), como en historias de fantasmas que desataban sus terrores nocturnos.
La muerte de su abuelo en 1904 les empujó a mudarse de la enorme casa en la que vivían a una mucho más pequeña en los alrededores. Lovecraft describiría más adelante esta etapa como un periodo oscuro y deprimente para él.
Pese a todo, Lovecraft siempre mostró un gran interés en sus estudios, pero su frágil salud, sus continuas crisis nerviosas y sus dificultades con las matemáticas evitaron que siguiese adelante de sus estudios en los que, finalmente, nunca se graduó.
📰 Una figura controvertida
Aparentemente, Lovecraft era un niño superdotado, se dice que empezó a leer a los dos años y que ya escribía relatos a los cinco, llegando a escribir sus primeras historias con apenas 15 años en una revista de astronomía; disciplina en la que siempre se había sentido interesado junto con la mitología griega y romana a la que había tenido acceso a través de su abuelo.
Su primera publicación formal tuvo que esperar hasta 1912, cuando fue publicado su relato “Providence in 2000 A.D.”, una ficción futurista en la que los habitantes blancos de origen europeo de Providence eran desplazados gradualmente por inmigrantes.
Durante toda su vida, y cómo en muchas ocasiones se revela en su obra, Lovecraft mantuvo posiciones cercanas al fascismo. Conocida era su admiración por Mussolini y su carácter reaccionario en lo político y lo social.
La obsesión de Lovecraft por escribir de forma adecuada siguió moldeando su forma de escritura, mientras que en el fondo ésta iba siendo influenciada por las revistas “pulp” que leía con asiduidad (aunque reconoció odiarlas) y en las que, a menudo, se topaba con historias raras por no decir directamente inclasificables.
En torno a 1919, publicó un relato llamado “Dagon” en el que se anticipaba la mitología que le acabaría haciendo mundialmente famoso.
🌏 Un creador de mundos
En 1921, y después de complicaciones tras una cirugía, Susan, la madre Lovecraft, moría inesperadamente. Esto no hizo que Howard dejase de escribir, sino que siguió escribiendo de manera aún más prolífica y comenzó a dejarse ver en convenciones de escritores amateur. En una de ellas, celebrada en Boston en 1921, conoció a Sonia Greene, con la que contraería matrimonio tres años después.
Tras su matrimonio, decidieron mudarse a Nueva York, ciudad en la que atravesaron dificultades económicas que, finalmente, desembocaron en la ruptura del matrimonio en 1926.
Durante su estancia en Nueva York, Lovecraft entró en contacto con círculos de escritos locales y llegó a trabajar como "ghost writer” (escritor fantasma) para varios de ellos. Como respuesta a este periodo de inadaptación y ruptura matrimonial, Lovecraft redactó uno de sus cuentos más conocidos “The Horror at Red Hook“, obra que supone el preámbulo oficial a “Los Mitos de Cthulhu”
👾 Los mitos de Cthulhu
“The oldest and strongest emotion of mankind is fear, and the oldest and strongest kind of fear is fear of the unknown.”
H.P. Lovecraft
Se denomina Mitos de Cthulhu al ciclo literario de horror cósmico que H.P. Lovecraft desarrolló entre los años 1921 y 1935 en los que el autor mezcla de manera magistral el horror, la fantasía y la ciencia ficción.
En los trece relatos que componen el ciclo (hay estudiosos que añaden o quitan alguno) Lovecraft describe el choque entre nuestro mundo y una antigua dimensión habitada por criaturas indescriptibles cuyo único fin es acabar con la humanidad.
En palabras de Lovecraft, toda esta mitología gira en torno a la siguiente idea:
“Antaño nuestro mundo fue poblado por otras razas que, por practicar la magia negra, perdieron sus conquistas y fueron expulsadas; pero viven aún en el Exterior, dispuestas en todo momento a volver a apoderarse de la Tierra”
Bajo esta premisa, la obra de Lovecraft redefinió los cuentos de terror clásicos anglosajones y pasó del fantasma gótico a unos seres de poderes insondables que se esconden en lo más profundo del tiempo, del espacio y de la propia Tierra.
En sus relatos, los protagonistas se enfrentan a estas monstruosidades encontrándose siempre en la delgada línea entre la cordura y la locura causada por no poder distinguir la realidad de una pesadilla.
Los seres que dan forma al panteón mitológico de Lovecraft se dividen en Primigenios, Dioses arquetípicos y razas menores, siendo Cthulhu -perteneciente al grupo de los Primigenios- el más conocido del imaginario creado por Lovecraft.
En “La llamada de Cthulhu” Lovecraft describe a este ser como un monstruo vagamente antropomórfico con cabeza de pulpo, tentáculos y prodigiosas garras.
Obviamente, Cthulhu no era el único de estos Primigenios, de hecho Lovecraft creó toda una pléyade de aberraciones relacionadas ente sí:
La vida de Lovecraft no fue para nada fácil. Su difícil infancia, sus problemas de salud, la muerte de sus padres o su permanente inadaptación social y al mundo de su época le hicieron imposible llevar una vida convencional.
Asimismo, sus dificultades para encontrar un trabajo le mantuvieron siempre al límite de la pobreza, viéndose obligado a saltarse comidas para poder comprar material con el que escribir y enviar correspondencia.
Pese a ser un adelantado a su época en términos artísticos, Lovecraft murió solo, pobre y anónimo el 15 de marzo de 1937 a consecuencia de un cáncer intestinal.
Sin embargo, su legado a día de hoy es extensísimo y su influencia toca multitud de disciplinas como la escritura, la poesía, el cine, la música, los videojuegos o los juegos de mesa.
Su universo es ya parte de la cultura popular y su impacto en la definición de la literatura fantástica moderna no puede haber sido mayor como así atestigua uno de sus alumnos aventajados, Stephen King:
Para iniciarse en la obra de Lovecraft, se pueden destacar tres relatos de los Mitos de Cthulhu: “La Llamada de Cthlhu” (1926), “El caso de Charles Dexter Ward (1928)” y “En las montañas de la locura” (1931).
Es en este último, “Las montañas de la locura”, en el que se menciona a unas abominaciones denominadas Shoggoths. Y es de eso justamente de lo que quería hablarte hoy.
🦠 Unos sirvientes monstruosos
Los shoggoths son una raza menor que aparece por primera vez en “Las Montañas de la Locura”. Estos seres son una creación de los Primigenios y su apariencia es la de una especie de ameba amorfa repleta de ojos con gran fuerza y resistencia pero con muy poca inteligencia.
Según la mitología de Cthulhu, estos sirvientes de los primigenios fueron creados sin capacidad alguna de raciocinio, pero en su evolución durante eones, acabaron desarrollando conciencia y, finalmente, terminaron rebelándose contra sus creadores.
¿A alguien le suena esta historia?
🧑🏻🦱 RLHF: Reinforcement Learning (from) Human Feedback
Nos referimos con RLHF (Reinforcement Learning from Human Feedback) a las técnicas que “recompensan” a un modelo usando bucles de realimentación en los que participan humanos.
En otras palabras, el RLHF es un mecanismo para “ajustar” un modelo a su comportamiento esperando haciendo que los humanos le vayan indicado que es y que no es correcto o aceptable como salida.
La técnica RLHF, aunque bien conocida desde hace mucho, ha venido cobrando relevancia en los últimos meses debido a su aplicación en ChatGPT. Si tienes curiosidad y quieres saber más sobre RLHF, puedes echar un vistazo a este artículo.
🦠 El Shoggoth de nuestro tiempo
Desde finales del año pasado viene circulando este meme en Internet (especialmente en Lesswrong y en twitter, dónde si no):
El “Shoggoth con cara sonriente”, que es el nombre de este meme, ilustra usando esta referencia Lovecraftiana la noción de que los LLMs (Large Language Models) que se están desarrollando son un monstruo enmascarado por una cara amable que es el entrenamiento para hablar con humanos.
El meme tiene como origen otro tweet en la que se ilustraba la introducción del RLHF en GPT-3:
Para entender mejor el fondo de este paralelismo, tiene sentido echar un vistazo a la descripción que hace Lovecraft de estas criaturas:
[Shoggoth] were normally shapeless entities composed of a viscous jelly which looked like an agglutination of bubbles; and each averaged about fifteen feet in diameter when a sphere. They had, however, a constantly shifting shape and volume; throwing out temporary developments or forming apparent organs of sight, hearing, and speech in imitation of their masters, either spontaneously or according to suggestion. (…)
The newly bred shoggoths grew to enormous size and singular intelligence, and were represented as taking and executing orders with marvellous quickness. They seemed to converse with the Old Ones by mimicking their voices — a sort of musical piping over a wide range, if poor Lake’s dissection had indicated aright — and to work more from spoken commands than from hypnotic suggestions as in earlier times.
Esta analogía no es más que el reflejo del miedo a lo desconocido y cuya idea de fondo es que este entrenamiento humano no está haciendo más que poner una cara amigable a un Shoggoth/Máquina opaco e intrincado sobre el que no tenemos control.
Es difícil que Lovecraft en algún momento llegase a imaginar el enorme éxito póstumo que tendría en el futuro pero, lo que es seguro, es que nunca pudo haber imaginado que su mitología acabaría siendo usada para ilustrar nuestros temores actuales casi un siglo después de su muerte.
Sin saberlo, Lovecraft imbuyó al Shoggoth con unas características asimilables a los modelos de IA que estamos viendo crecer y que podrían seguir un mismo destino.
El paralelismo es claro, unas criaturas (modelos) creados para ayudarnos acaban adquiriendo conciencia y se rebelan contra sus creadores.
En definitiva, el Shoggoth con cara sonriente ilustra cómo esta tecnología puede acabar convirtiéndose -sin que nos demos cuenta- en algo totalmente ajeno, incontrolable e incomprensible para los humanos. Exactamente igual que las criaturas mitológicas que Lovecraft nos regaló.
¡Gracias como siempre por leer hasta aquí!
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